Queridos lunátics, pueden armar y desarmar su propia casa. Pueden darle cambios de imagen. llevarla a donde sea. Invitar a quien quieras. En otra entrada he hablado acerca de esta casa que somos nosotros. ¿O tal vez nosotros vivimos dentro de la casa que es nuestro cuerpo?
En varias filosofías orientales, entre ellas el budismo, se dice por ejemplo: puedes perder un ojo, pero el ojo no eres tú. Puedes perder un brazo, pero el brazo no eres tú.
Podrías perder tu corazón...y no eres tú.
Hay algo más.
Pero es claro que nuestra casa interna se amuebla, se reviste de todo aquello que recolectamos en nuestro paso: la experiencia. La experiencia es la vida. Y no es el fin sino el medio.
Es hermoso saber que tu hogar yace dentro de tí y que llevas tu casa doquiera que vas tú.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Lunatic, tú ¿qué piensas?
Todo aquello que bajo la Luna, prende nuestra mirada: