Como que luego de todos los años que has vivido (nunca serán muchos), estaría bien hacerlo de manera distinta. Nada más para ver qué se siente...y qué pasa.
Más conciente de lo que se hace.
Más conciente de las palabras que decimos. Yo a veces me suelto a decir lo que siento. Y luego te das cuenta que darle una pensadita podría hacer que salieran palabras más exactas.
Más concientes de lo que se dice y se hace. Cada momento es una oportunidad de practicarlos. Como cuando practicas a cada momento el idioma nuevo que estás aprendiendo.
Personalmente no me agrada mucho el decir "yo no te perdono, que te perdone Dios." Mejor lo perdono yo y me perdono también a mi mismo. ¿Para qué vivir con esos temblores dentro?
Es un ejercicio diario. El hecho de que alguien comience a leer filosofías distintas, intente nuevas dietas, experimente otros pensamientos, no significa que quiera sentirse de mayor altura. Simplemente se hace el intento de probar una forma diferente de ser mejor. Hay que darnos la oportunidad, ¿no crees?
Cada quien tiene su historia, lo cual quiere decir que cada quien tiene sus penas. Y todo tiene varias facetas, no sólo una, ni siquiera dos.
Como la luna.
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